TRILOGÍA SUMISIÓN
TARA SUE ME
Decidí en ese momento que aquél era mi límite. Es importante tener límites. Debes decirte a ti misma hasta dónde quieres llegar. Y ése era el mío.
Decidí en ese momento que aquél era mi límite. Es importante tener límites. Debes decirte a ti misma hasta dónde quieres llegar. Y ése era el mío.
—Jamás he
conocido a nadie como tú. Nunca me había tropezado con nadie, ya fuera hombre o
mujer, con tanta fuerza; con tanto coraje. No estás sola. Nunca estarás sola.
+ FRASES:
________
4. Wet and wild
6. Rough and ready
Un rudo pero eficaz Navy SEAL se embarcará en la misión más peligrosa de su vida... un viaje a través del tiempo.
Una misión sin ningún tipo de misericordia...
Huyendo de un tirano, el joven Torolf Magnusson y su familia viajaron accidentalmente en el tiempo desde el s. XI a la América actual. Aunque al principio fue duro, consiguieron adaptarse bastante bien, hasta el punto de que, actualmente, Torolf se ha convertido en un teniente de los Navy SEALs dispuesto a repetir ese viaje en el tiempo con una nueva misión: él y su equipo de subordinados regresarán al siglo XI para destruir al villano que aterrorizó a sus antepasados y a toda una nación.
Una dulce rendición...
Pero cuando los apuestos SEALs se dan cuenta de que han ido a parar en medio de un santuario -repleto de mujeres- no les queda más remedio que retrasar sus planes... para el disgusto de Hilda, la líder del santuario. Aunque en un primer momento se muestra reticente, muy pronto termina sucumbiendo a la pasión de Torolf y el término "Fuerzas Especiales" toma un nuevo significado. Pero cuando la balanza se inclina a favor de Torolf, Hilda deberá hacer frente al hecho de que quizá su amor no pueda sobrevivir al paso del tiempo.
7. Down and dirty
El Navy SEAL Zachary Floyd es tan apuesto que se ha ganado a pulso el apodo de "Niño bonito". Britta Asadottir es tan grande que han terminado por llamarla "La Gigante".
Todo lo que Zach quiere es un poquito de amor de la mujer que le vuelve loco... y quizá alguien que le ayude a criar al hijo del que, hasta ahora, no había tenido noticias de su existencia.
Todo lo que Britta quiere es unirse a los WEALS, la versión femenina de los SEALs... y, con un poco de suerte, experimentar un poco de pasión.
8. Viking unchained
Thorfinn es un fiero guerrero vikingo que llora la desaparición de su hijo, Miklof. Lydia es una mujer de hoy en día que llora la muerte de su esposo, un Navy SEAL.
Thorfinn viaja mil años en el tiempo y se convence de que Mike es su propio hijo Miklof. Lydia piensa que Thorfinn, que afirma ser un viajero en el tiempo vikingo, es igualito que su marido.
Thorfinn se siente tentando por la extraña mujer... sobre todo cuando ella le encadena a su cama. Lydia se siente tentada por Thorfinn cuando él le enseña que hay ciertos trucos que sólo un vikingo tiene en su repertorio.
¿Se trata realmente de un viaje en el tiempo o de un milagro?
¿Podría ser posible que algunas veces Dios, o los dioses, intervengan en las vidas de la humanidad... cuando el destino exige que dos amantes de épocas diferentes deban encontrarse?
¡Caedmon de Larkspur es el mayor patán que he conocido! Cuando mis hermanas y yo llegamos a su castillo nos recibieron criados y niños que corrían como salvajes, en tanto que Caedmon estaba en la cama después de haberse pasado la noche bebiendo cerveza. Sin duda pronto habrá otro niño, pues he de reconocer que se trata de un hombre apuesto y viril. Y debo soportarle, ya que necesitamos desesperadamente protección, aunque no quiero ni imaginar lo que este caballero me pedirá a cambio…
Él dijo…
Después de nueve largos meses al servicio del rey, lo único que quería era un poco de paz… no a cinco princesas vikingas correteando por mi fortaleza. Y la temperamental pelirroja que irrumpió en mi cámara aquella mañana es la peor de todas. Vaya, debería echarla a patadas… pero tengo un plan mucho más perverso y delicioso en mente para Breanne de Stoneheim, un plan que la hará morir de deseo.
—Estoy tan confundido. Tengo dividido el corazón y la cabeza. Por responsabilidades. Por lealtad. Por el amor a mi tierra. La preocupación por mis hijos. Y tu protección. Sí, sí me importas, pero todo llega en el momento equivocado. En verdad, probablemente nunca fue un buen momento para empezar nuestra relación.